Número 4 / Abril 2003

El proceso de Mediación

editorial

Este número de la revista es una convocatoria para reflexionar a partir de la práctica.
El proceso de mediación es un tema más que conocido para todos aquellos que se han formado como mediadores, para quienes trabajan activamente como mediadores, para los participantes, y los abogados que los acompañan. Por lo que, podría decirse que se trata de un tema remanido, sobre el que está todo dicho, y no hay nada que agregar.
La intención ha sido compartir las reflexiones y sistematizaciones que el ejercicio de la mediación le permitió a los autores que presentamos.
¿Por qué nos parece importante?
Porque el proceso y el modo de llevarlo adelante es lo que define a una mediación, porque el proceso es la única herramienta del mediador, y a la vez es el espacio en el que desplegar su arte y dar cuenta de su ética.
El primer artículo, de Dora Fried Shnitman y Jorge Schnitman enmarca a la mediación en los nuevos paradigmas culturales.
Las claves de la concepción de la mediación estratégica están descriptas en el artículo de Rubén Calcaterra.
Las condiciones necesarias tanto desde el lado de los participantes como de parte del mediador es el tema que aborda hondamente Paricia Aréchaga.
La colaboración y la competencia en el seno de la mediación, le imponen al mediador elaborar distintas estrategias, y poner a prueba su rol de diferentes modos. Este tema es desarrollado por Matilde Risolía, Diana Eilbaum y María Elena Caram.
Dos trabajos riquísimos que rodean el tema clave de la neutralidad, son los de Silvana Greco y Gachi Tapia. En uno encontramos la propuesta de una secuencia comunicacional, y en el otro reflexiones sobre la legitimación. En ambos casos los esfuerzos se encaminan a la construcción del rol de tercero neutral.
Esta propuesta se dirige a quienes se interesan, a quienes se inician y a aquellos que practican la mediación, porque la revisión crítica de nuestra práctica es la herramienta más poderosa para el aprendizaje desde la propia experiencia.